viernes, 28 de noviembre de 2008

Salir corriendo

"Hay que hacer caso a las campanas, antes que a las autoridades".
Eso creo que era lo que pensaba un grupo de jubilados que acudió al salón de plenos de su Ayuntamiento para enterarse sobre el proyecto del geriatrico que van a construir en la localidad. El acto comenzó a las 19:00, con la intervención de varios cargos, que aunque micrófono en boca tuvieron que subir el volumen de su voz para que les escuchasen las señoras sentadas en la segunda fila. Las mismas que no se creían que fuese periodista y me tomaban por representante de alguna caja de ahorros.
La explicación continuaba y continuaba hasta que sonaron las campanas de las 19:30 y se escucho el ruido de las sillas, "la novena, la novena", comentaban algunos de los jubilados. Y sin tiempo para más salieron escopetados de la sala.
Batallita curiosa...

martes, 25 de noviembre de 2008

Relax

Simulemos al gato y descansemos un rato...

miércoles, 19 de noviembre de 2008

El lado bueno

Somos la sal y el perejil de los distintos actos a los que asistimos. Siempre intentamos sacarle punta al acto más normal y protocolario, pero, hay veces en los que nuestra profesión nos invita a conocer y sobre todo disfrutar, nos acogen bien y como somos un medio de difusión nos invitan a casi todo. En esta tierra Navarra por donde yo me muevo son habituales los actos relacionados con el vino, por ello, la Denominación de Origen del Vino Navarro. Y este hecho es la excusa perfecta para que dentro de tus ruedas de prensa y actos publicos de trabajo te toque ir a una cata de vino, a una degustación o a una excursión para conocer la ruta del vino. Esta semana por ejemplo está siendo entretenida: invitación a la degustación del nuevo menú de los Paradores Nacionales; invitación a una cata de vinos de una bodega en un bar; y excursión de todo el día a través de la ruta del vino. Sin duda, estos días no me puedo quejar de mi trabajo. Se agradece que nos saquen de las oficinas, nos inviten y además nos traten de maravilla. Aunque vayamos a trabajar, siempre terminamos disfrutando.

jueves, 13 de noviembre de 2008

Sonrie!

"El día peor empleado es aquél en que no se ha reído"
Sonrie!

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Locura...

No sabéis muy bien lo que puede llegar a ser quedarse solo en la oficina unas horas. Te sientas en tu silla comienzas a trabajar y no hay tu tía de avanzar. Os cuento: 1. Llama un colaborador indicando que ya te ha mandado los artículos para el siguiente número. Le atiendes, te explica paso a paso todo lo que ha enviado, le confirmas que te ha llegado, hablas con el... Mientras te entra una mujer de unos 90 años en la oficina y se sienta en el despacho... 2. Cuelgas y atiendes a la mujer que te espera sentada en el despacho. Te empieza a contar que a su hijo no le llega la revista, que le faltaba por anotar el código postal. Le coges los datos bien. Pero la mujer no tiene ninguna gana de irse. Te cuenta que a los nuevos suscriptores se les da un regalo, que ella ha hecho uno nuevo, y que no le hemos dado ningún regalo, que ella quiere el que viene anunciado... Le explicas que su regalo es de otro tipo, ella erre que erre, le explicas otra vez, ella erre que erre, al final se da por vencida y te dice, ¡A mí una fachada más en la revista y me borro!, (fachada no de pared, si no de linea editorial...). Al final nos entendemos, le escucho con paciencia, le atiendo, termino contando de donde soy, me entero donde viven todos sus hijos y quienes son sus vecinos... Mientras suena el teléfono 3. Al aparato alguien a quien le han llegado dos facturas y demanda que hay algún error. Con paciencia lo atiendes y lo rebotas a la asesoría que lleva las cuentas. Y la mujer sigue en la oficina... De buenas maneras le acompañas a la puerta, la despides e intentas empezar a trabajar... (eso si antes le anotas el numero de teléfono de la oficina en el cartón de las medicinas...) 4. Te llama tu coordinador para saber que vas a escribir hoy en tú página del diario, no atinas a responder nada, no sabes ni donde tienes la cabeza! De buenas maneras quedas para hablar después, y decides mandarle la respuesta por e-mail. 5. Llama alguien que tiene que enviarnos unos datos para un artículo, quedas en que se le llamará después, (de paso te dice que menudo trancazo tienes, por la voz que escucha tras el aparato), al final quedas en darle el e-mail... 6. Llaman de un quiosco diciendo que les faltan revistas, que se les han mandado de menos... De todas las llamadas recibidas, solo me corresponde a mi una, pero es lo que tiene quedarse solo y atender a todos... Voy a pasar a cada cual su nota correspondiente con su llamada... Y en el fondo me ha caído bien la mujerica... (mientras escribo vuelve a sonar el teléfono...)