Sin conversación en el ascensor

Aún sigo sin conocer a los vecinos. Alguna que otra vez se escucha algún ruido, te acercas a la mirilla, la abres, como lo hacian las abuelillas, pero no ves ni escuchas nada. Te quedas con la mosca detras de la oreja. Ya nos iremos encontrando por el enorme pasillo, porque, en el ascensor por ahora toca ir sola o con tu propia compañia. Pero total, ¿quizás mejor ir solo no? Porque para hablar del tiempo o de la actualidad, mejor no hablar. Las declaraciones de Rajoy diciendo que los inmigrantes se van a tener que integrar en España y aprender la lengua, el español, no tienen desperdicio. Si llega a decir lo mismo Ibarretxe, diciendo que aprendan euskera, o Pascual Maragal, diciendo que aprendan catalan, se hubiese liado parda, no creeís? Ya estariamos hablando de racismo en el mejor de los casos.

Otro de los temás que pueden ser del ascensor, las declaraciones del nuevo fichaje del PP, si, ese que dice que en la bodas de lesbianas habrá que poner degustación de tortillas y en las de gays perritos calientes. Sin comentarios. Y ahora se excusa diciendo que su intención no era molestar a nadie, que hablaba ironicamente. Buena campaña de marketing entonces, que penoso caer tan bajo para darse a conocer, no?

Ya vale por hoy, que las noticias me esperan...